Los cronógrafos Heuer impulsados por los Calibre 11 y Calibre 12 de los años 1970 pueden dividirse fácilmente en tres generaciones. La primera generación se compone de tres modelos, con el Autavia y el Carrera siguiendo presentes desde los años 1960, y el Monaco representando un nuevo modelo que se adelantaba al estilo de la década de los 70. Presentada en 1971, la segunda generación de los cronógrafos Calibre 12 (que incluía el Calculator, el Montreal y el Silverstone) capturaba el estilo salvaje y la exuberancia de los años 1970, con cajas de gran tamaño y colores brillantes. En 1977, Heuer presentó la tercera generación de los cronógrafos Calibre 12, con modelos que combinaban el estilo deportivo de los 60 con elegancia, convirtiéndolos en unos cronógrafos lo suficientemente sofisticados como para lucirlos en cualquier ocasión.
Lanzada en 1978, la colección Verona comprendía los relojes más elegantes y de inspiración clásica de Heuer en los años 1970. La caja redonda presentaba líneas sencillas y asas tradicionales, evocando los primeros Carrera de principios de los 60, y los colores de las esferas se limitaron a negro y gris. El uso de cajas bimetálicas, realizadas en acero inoxidable y oro, hacía un guiño a un estilo popular de los 70, pero esta característica se integró con sobriedad y acorde con la elegancia de la colección.
No obstante, siendo de finales de los años 1970, la colección Verona no contenía solo cronógrafos automáticos, también integraba dos opciones de cuarzo en la gama: un reloj de cuarzo analógico con tres agujas (agujas tradicionales) y una gama Verona "Twin", que combinaba una pantalla digital y agujas "analógicas".
El Verona solo se incluyó en el catálogo de Heuer durante unos cuantos años, de 1978 a 1981. El cronógrafo Calibre 12 y el reloj de cuarzo analógico se retiraron en 1979 y se remplazaron por la serie digital Twin, con modelos fabricados hasta alrededor de 1981.
LA INSPIRACIÓN
Verona es una ciudad relativamente pequeña ubicada en el norte de Italia, más o menos a medio camino entre Milán y Venecia. Es una ubicación espectacular que llegó a tener un papel importante en el Imperio austriaco y, por supuesto, es el escenario de la tragedia Romeo y Julieta del dramaturgo Shakespeare. De hecho, hoy en día puede visitarse el balcón de Julieta en Via Cappello.
Durante finales de los años 70, Heuer nombró dos relojes en honor a dos conocidas ciudades italianas: Cortina y Verona. Ambas ciudades eran atractivos destinos para la clientela de la jet set a la que Heuer trataba de atraer y con las que podría haber sido especialmente popular en el mercado europeo, donde Heuer trataba de incrementar sus ventas. El uso de los nombres Cortina y Verona también representa un distanciamiento del mundo del automovilismo, motivo por el que se habían escogido las ciudades italianas de Monza y Módena a principios de la década, ya que tenían un vínculo con la escudería Ferrari de F1. Los cronógrafos Heuer siempre habían sido populares entre los aficionados al automovilismo, pero la jet set que viajaba a los mejores complejos hoteleros era otro mercado atractivo para la marca.
DISEÑO
Tras una década de audaces cajas generalmente de gran tamaño diseñadas para albergar los movimientos Calibre 12 más grandes, el Verona representaba una vuelta al estilo clásico de los años 1960 (como pudo apreciarse en el Carrera). Con 38 milímetros, el Verona era ligeramente más grande que el Carrera de los años 1960 (36 milímetros), así como el Verona era una versión más suave y redonda de la primera generación del Carrera, que contaba con asas más angulares.
AGUJAS
Las agujas estrechas y rectangulares del Verona eran habituales en aquella época. Las agujas son similares a las utilizadas en las colecciones Kentucky y Manhattan, también de finales de los años 1970.
Los marcadores de horas rectangulares destacan y cuentan con un pequeño punto luminoso detrás de cada índice. Estos marcadores son más largos que los utilizados en diversos cronógrafos Heuer anteriores, e imitan el diseño de las agujas de las horas y los minutos.
CAJA
Todas las versiones del Verona presentan una caja de 38 mm de acero inoxidable satinado, cuya profundidad varía según el movimiento que alberga. La caja que alberga el movimiento Calibre 12 automático es la más gruesa de la colección, con un cristal de plexiglás que destaca sobre el bisel, mientras que los movimientos electrónicos permiten el uso de cajas más finas y de cristales minerales planos.
La caja del Verona presenta una pequeña muesca donde se posiciona la corona, permitiendo una extracción más fácil de la corona.
VERONA CRONÓGRAFO AUTOMÁTICO - CALIBRE 12
Hay cuatro cronógrafos Verona impulsados por el movimiento Calibre 12, con dos estilos de cajas y dos colores para las esferas. Las cajas son de acero inoxidable o bimetálicas (acero inoxidable y oro), con esferas negras o grises
Referencia 110.213G – Caja de acero inoxidable con esfera gris
La esfera plateada mostrada anteriormente presenta un sutil grano vertical y se combina con unas agujas de la subesfera y de cronógrafo y marcadores de la esfera negros. Las agujas de las horas y los minutos, así como los marcadores de horas, presentan bordes en negro.
Referencia 110.213N - Caja de acero inoxidable con esfera negra
La esfera negra presenta un acabado brillante y agujas y detalles en blanco, incluyendo las agujas de las horas y los minutos, así como los marcadores de horas.
Referencia 110.215G – Caja bimetálica con esfera gris
La caja bimetálica del Verona es de acero inoxidable, con detalles chapados en oro en el bisel, la corona y los pulsadores. Las agujas también presentan un color dorado, con bordes pintados en negro, a juego con el estilo de los marcadores de horas.
Referencia 110.215N - Caja bimetálica con esfera negra
En la versión con esfera negra del Verona bimetálico, las agujas y marcadores presentan bordes pintados en blanco para proporcionarle un contraste óptimo en la esfera. Las agujas y marcadores presentan inserciones doradas para combinar con los detalles dorados de la caja.
HEUER VERONA CUARZO
A finales de los años 1970, Heuer presentó relojes de cuarzo con tres agujas (con agujas "analógicas") en varias de sus colecciones, incluyendo la Carrera, Kentucky y Verona. La gama de cuarzo de los relojes Verona imita los modelos de cronógrafo Calibre 12 de la colección Verona, ofreciendo cuatro versiones: cajas de acero inoxidable y bimetálicas, con esferas negras o grises. Cada versión presenta la fecha a las 3 y tiene impreso "Quartz" en la esfera. Las cajas de los relojes de cuarzo cuentan con un perfil más estilizado que el cronógrafo Calibre 12
Referencia 361.213N - Caja de acero inoxidable con esfera negra
Referencia 361.213G – Caja de acero inoxidable con esfera gris
Referencia 361.215N - Caja bimetálica con esfera negra
Referencia 361.215G – Caja bimetálica con esfera gris
VERONA TWIN DIGITAL
A finales de los años 1970, Heuer presentó versiones Twin de varios de sus modelos. Estos relojes incluían agujas analógicas tradicionales para la hora e indicación digital para las funciones de cronógrafo, calendario o alarma.
Podemos encontrar dos versiones del Verona Twin: el catálogo de 1981 incluye un cronógrafo (con "Chronograph" impreso en la esfera) y un segundo (mostrado anteriormente) que presenta "Alarm". El catálogo de 1981 hace referencia a dos modelos de cronógrafo:
- 381.215N - Esfera negra, acero inoxidable con elementos chapados en oro
- 381.213N - igual que el anterior, pero íntegramente de acero inoxidable
Las versiones digitales del Verona usan la misma caja de 38 mm y tienen el cristal mineral plano de la gama de cuarzo, en lugar del cristal de plexiglás alzado de los cronógrafos automáticos. El otro elemento destacable es que los marcadores de horas están montados sobre el bisel interior, no directamente sobre la esfera.
MOVIMIENTOS
Hay tres movimientos dentro de la gama Verona:
- Verona Cronógrafo: Heuer Calibre 12 (Chronomatic)
- Verona Cuarzo reloj analógico: ESA 9362
- Verona Twin: ESA Y2 900.231
RESUMEN
El Verona se distingue entre los cronógrafos Heuer de los 70 gracias a su diseño clásico y elegante. El cronógrafo automático Calibre 12, que presenta una caja redonda y unas asas curvadas tradicionales, así como la posibilidad de esferas negras o grises, sigue las líneas de los cronógrafos clásicos de las décadas anteriores. Las cajas bimetálicas iban "en tendencia" con el estilo de los años 1970, al mismo tiempo que mantenían el aspecto sobrio de los modelos de acero inoxidable.
En esta época, Heuer amplió sus líneas de cronógrafos automáticos para incluir tanto relojes de cuarzo "analógicos" (con tres agujas tradicionales y calendario) como relojes Twin (con agujas analógicas e indicación digital), y estos modelos completaron la colección Verona, cumpliendo los deseos de aquellos clientes que querían un reloj electrónico o un cronógrafo más moderno.